Una funda dental también es conocida como corona dental, y no son más que prótesis fijas que recubren los dientes.
La funda va acoplada al propio diente natural de forma fija, preparando previamente al diente para la implantación.
La utilidad que tiene la funda dental es para que el diente débil recupere su función para poder masticar adecuadamente, mientras que también sirve para recuperar la estética del diente dañado.
¿Cuándo es recomendable poner fundas en los dientes?
Entre los motivos por los que el paciente podría pensar en implantarse una funda dental, estarían los siguientes:
- Para dar mayor solidez y refuerzo a un diente que está débil por caries o roto.
- Para cambiar una reconstrucción anterior.
- Para resolver problemas de color o tintes internos del diente.
- Mejora de la capacidad para masticar.
- Para sustituir un diente.
- Corregir posiciones o formas incorrectas del diente.
Existen diferentes tipos de fundas dentales dependiendo del material. Si estás pensando en implantarte una prótesis dental como es la corona, deberás encontrar un equilibrio para que te resulte funcional, estéticamente agradable y que te dure en el tiempo, aunque una corona en perfecto estado puede durar hasta 20 años.
Tipos de fundas dentales
Tenemos fundas de materiales más tradicionales, como las fundas de metal, las cuales presentan una estética menos agraciada; u otras opciones más modernas con una tecnología avanzada las cuales harán que la prótesis sea prácticamente imperceptible, obviamente, a un precio mucho mayor.
Los tipos de fundas dentales que se suelen encontrar son los siguientes:
- Fundas de metal. Se elaboran mezclando diferentes metales. Aportan una resistencia y durabilidad muy alta, así como un buen ajuste al diente. Por otro lado, son las menos agraciadas estéticamente y no son recomendables a no ser que el paciente quiera lucir algún diente metálico o de oro.
- Fundas de resina. La duración es inferior a la porcelana, pero las propiedades para un periodo largo de tiempo son buenas, aunque el coste es superior a unas de acrílico.
- Fundas dentales provisionales. Diseñadas para un tiempo de uso corto. Elaboradas en acrílico, no cuentan con una durabilidad muy alta, así como resistencia y protección que cuidarán del diente en un periodo largo de tiempo. Son más económicas, pero deberán ser revisadas por un profesional ya que pueden ocasionar daños importantes en el paciente.
- Fundas de porcelana. Ofrece resultados muy naturales y mantiene la apariencia por más tiempo. La estética es muy buena y se suelen usar en los dientes de la zona anterior, sin embargo, la resistencia no es muy buena, aunque sí lo son sus propiedades.
- Fundas de zirconio-porcelana. Son las más recomendadas hoy en día. Se fabrican en una máquina a ordenador y destaca su gran dureza y resistencia a la corrosión. Se emplean para aquellos dientes que emplean más fuerza al masticar, como los premolares y los molares.
- Fundas de metal-porcelana. Son muy utilizadas, ya que el metal se encuentra en la parte interna y se recubre por la porcelana, lo que da una impresión muy natural a la sonrisa. La resistencia es buena, pero con el tiempo hay que remplazarla simplemente por la estética, ya que va apareciendo un arco gris alrededor de la funda cuando la encía se separa de esta y deja ver la unión entre el metal y la porcelana. Debido a esta última característica, hay pacientes que la descartan para lucir una sonrisa perfecta.
Todos los materiales mencionados cubrirán perfectamente la misión de la funda dental, que es devolver al paciente la capacidad de poder masticar correctamente.
La principal diferencia que tendrá que sopesar el paciente es la estética, que viene dada por materiales más modernos, pero también con ello un precio mayor.
¿Cómo se hacen las fundas de los dientes?
En cuanto al proceso previo a la colocación de la funda dental, se prepara el diente mediante el tallado dental.
El tallado dental consiste en reducir el grosor del diente para poder acoplarla funda correctamente de manera que quede adaptada a la perfección.
Posteriormente se mandan al laboratorio las medidas tomadas para la construcción de la corona dental según la valoración realizada por el odontólogo.
Una vez realizadas diferentes pruebas de adaptación, se acopla la funda al paciente mediante un cemento especializado para que quede perfectamente acoplado.
Centro Hémera trabaja día a día tratando a pacientes con problemas de estética dental para que puedan gozar de una sonrisa perfecta y de una salud bucal plena.
Estamos encantados de poder asesorarte y recomendarte individualmente si tienes cualquier tipo de cuestión acerca de tratamientos dentales. Consúltanos mediante teléfono, correo electrónico o visita nuestro centro para conocer todos nuestros servicios.
